Mbeguemi Online: El cocinero está nervioso

¡Escándalo en la junta municipal! El ex presi se puso más nervioso que tartamudo pidiendo fiado. Resulta que cierta concejal (inquilina nueva) solicitó en la sesión “que por favor le entregaran el acta de la deliberación anterior por lo menos 48 horas antes, para poder leerlo y verificar los puntos tratados. Y el bigote kandado explotó.

En realidad hubieron varios que saltaron de sus sillas: el mudito, kiñokis, y hasta el pulpito odix. Parecía que habían tirado un petardo en la sesión. Pero el que estaba más alterado era el “ex”. Nunca se vió a un liberal con la cara tan colorada. ¿Para qué quieren leer el acta? ¡Nada de leer! Sólo hay que decir ¡Aprobado! y ya está.

Mientras tanto, la refugiada política a cargo de Secretaría, aseguró que “el acta se le entrega temprano a los concejales” y agregó que “a las 7,30 se le llevó a la concejala Myriam, pero no había nadie en su oficina” (cosa rara, porque se rumorea que Secretaría de la HJM jamás abre antes de las 8, y ña pulpo aparece como a las 9…

Sin embargo… consultamos a la gente de aseo, a los guardias de abajo y del tercer piso, y la que sí estuvo temprano fue doña Myriam.

Los que no habrían llegado hasta muy avanzada la mañana… serían Ña Ody y su séquito de informantes.

¿Habría que revisar las cámaras para que digan la verdad?

LOS EXPEDIENTES X

Si el primer punto de la minuta cayó como un 3×3 en misa, el segundo punto fue todo un misil. La concejala Myriam manifestó su preocupación porque durante la reunión de Comisiones Asesoras (lunes 20) se encontró con expedientes de los años 2015, 2019 y 2020 que aparecieron por arte de magia, traídos por la asesora jurídica de la HJM.

“Son expedientes que yo no sé si estaban congelados, si estaban encajonados o qué” manifestó la legisladora colorada, y agregó “esto no puede ser, qué trámite se le puede dar a un expediente que lleva varios años escondido”.  En la sesión de la Junta se hizo un silencio total. Varias caras se descompusieron, y varias caretas se cayeron.

Siguió diciendo la concejala Fernández que “por eso solicito a los concejales que hagamos presencia los días lunes”, siguió pidiendo “que estemos los doce en comisión porque son dictámenes que tenemos que firmar”. “Nosotros somos aquí los concejales … es importante que nuestros asesores vengan a leer porque son brillantes profesionales… pero nosotros somos los contralores, queridos compañeros”.

“Yo solicito que el lunes estemos a hora y leamos los expedientes, que evaluemos las cosas en su verdadera magnitud, y allí estemos seguros para poder dictaminar”.

LE HE VISTO A VARIOS POR LA PRESIDENCIA

Obviamente, la asistencia o ausencia de nuestros concejales en las sesiones o en las reuniones oficiales de la junta no parece ser algo de importancia. Y eso sin mencionar que todos cobran millones  de guaraníes mensuales incluídos los que no asisten.

Tal vez la causa de tal falta de respeto a los ciudadanos de San Lorenzo se deba a que quienes deberían tomar nota de las asistencias e inasistencias… nunca lo han hecho.

¿Quiénes son responsables de controlar la asistencia de los concejales? El presidente de la Junta y la Secretaria de la Junta. Pero obviamente no cumplen. “…ese lunes yo estuve presente y le vi a varios por la presidencia y también se acercaron varios de los asesores… “ manifestó el mudito (que cuando le conviene, resulta que también habla)

Hay que explicarle al licenciado lilo que decir “le vi a fulano” no es lo mismo que decir “acá está el libro de asistencia de la Honorable Junta, debidamente foliado, rubricado y autenticado”. En realidad para burro no se estudia, señores, y como decía un antiguo profesor de derecho de la UNA… “no es lo mismo un silenciado que un licenciado.

Pero hay que reconocer que una de las frases más sabias de este mes, se la debemos al propio presi:  “… nosotros venimos de lunes a lunes y también los sábados”. ¡Genial! Había sido que el calendario semanal de la honorable corporación tiene como 9 días. (querido Lilo, escuchándote hablar es que empezamos a extrañar cuando no hablabas).

EL ENOJO DEL COCINERO

Como la cara se le estaba poniendo de tomate, le dieron la palabra a bigote kandado, quien, al más puro estilo stronista quiso exigir “…que la concejala diga quiénes son los que no vienen porque yo estoy todos los días…”. ¡No! Había sido que es la licenciada Fernandez la que tiene que tomar asistencia. ¿Y la Secretaría de la HJM para qué está?

Lo que pasa es que el abogado cocinero se desespera ante la posibilidad que estos nuevos inquilinos de la Junta empiecen a hacer preguntas incómodas. ¡Caramba! (Parece que de esta manera no vamos a poder resucitar la aplanadora para continuar haciendo todo aquello que antes se hacía…). ¿Qué se han creído estos honestitos?

Y, descaradamente, el ex presi agregó “…además este tema usted debió haber tocado antes con los colegas…”. ¡Claro! Así se hacían últimamente las cosas, negociando y transando entre amiwis detrás de los vidrios esmerilados de la presidencia, donde no hay posibilidad de que algún ciudadano (o algún periodísta) escuchen lo que dicen.

Y conste que si antes se escondían detrás de vidrios opacos, ahora ya no hay más de esos vidrios. Ahora – por las dudas- pusieron  paredes más sólidas para que haya menos riesgo de que se filtre alguna transadita o algún fato. Tiene razón en ese punto  el abogado cocinero, ellos (los que quedan) hacen las cosas  muy responsablemente.

¡APENAS 61!

Tan vivos que se creen algunos de los seis veteranos, y sin embargo son bastante tavy a la hora de “pisar el palito”. Cuando la concejal manifestó que “… faltarían unos 400 expedientes”, ovaldo, porotea, lilo, el pulpito  y kiñokisrespondieron al toque: ¡Nooo! ¡Apenas son 61 expedientes! Y los 6 nuevos pensaron  “gracias por el dato”.

Tan letrados se creen algunos por haber estado jodiendo al pueblo y a sus votantes durante 4 años. ¡Tan vivos se creen! Y sin embargo tan fácil les ponen las orejas de burro. La pregunta del millón es: ¿Por qué solo esos cuatro consejales estaban enterados que había 61 expedientes desaparecidos?

Con una pregunta inocente, la concejala novata hizo que confesaran los cuatro concejales “vivos” y su “inteligente” secretaria.  

LAS MINUTAS VERBALES

Hasta la propia aplanadora tiene problemas a causa de los haraganes que la integran. Y es que aparte de asistir cuando se les cantan las pelotas, cuando aparecen ni siquiera lo hacen llevando algún proyecto o alguna minuta. Van a sesión sin saber lo que pasa (salvo cuando hay algún curro), y se cuelgan de las ideas ajenas para salvar su show.

Por eso es que reiteradamente recurren a sus famosas minutas verbales:  simple improvisación sobre la marcha para que la gente se trague la idea de que ellos trabajan.  Por eso cuando tienen que argumentar y defender sus proyectos, pasan tremendo papelón porque no saben lo que dicen, y no saben lo que están mocionando.

Y lo peor es que, hasta se olvidan de pasar por escrito sus delirios (perdón minutas verbales) haciendo que sus aliados y alcahuetes se vean en figurillas para transcribir como minuta algo que ni Dios Todopoderoso podría entender. Y esto se desprende del sincericidio del mudito, quien no dudo en asegurar que “… tenemos un grave problema porque todos los compañeros hacen minutas verbales, y no acercan a secretaría general y por ese motivo no podemos hacer el acta”. ¿Todos presidente?.

¿CUÁNTAS SECRETARÍAS EXISTEN?

Hay ocasiones en que se confunden tanto las cosas, y se maneja tan mal el vocabulario que, básicamente, hay que pensar mucho para entender. En la última sesión, varias veces los concejales (incluido el presidente) se refirieron a la Secretaría de la Junta llamándola Secretaría General. No es lo mismo, chicos. Hay que leer la ley.

Tal vez la confusión viene porque los fatos se hacen al mismo tiempo en el tercer cielo y en el territorio de elefantita.  O quizás el pulpo les confunde porque extraña su negocio kue.  Sea como sea, señores veteranos de la junta, empiecen a practicar los términos que usan, porque entre lo que dicen y lo que es… tuicha la diferencia.

O tal vez le llaman Secretaría General a ambas oficinas, porque en ambas oficinas están las verdaderas generalasde la Municipalidad: Intendentes, Concejales, Contraloría y todo eso son simple gentuza de paso… las que mandan y las que siempre se quedan con el osobuco… son ellas dos.

¿TRES DÍAS PARA ESCRIBIR UNA PÁGINA?

Cada vez nos sorprendemos más con las capacidades que exhiben nuestros veteranos legisladores. Por ejemplo: cuando se trata de improvisar una minuta verbal, les toma unos pocos segundos improvisar. Pero para escribir eso, no les alcanza el resto de la semana. Y eso queda demostrado con el sincericidio del  silenciado presidente.

El hábil muchacho decidió (él nomás, sin consultar con la plenaria), que va “… a poner un plazo para que los concejales presenten sus minutas verbales (de los miércoles) por escrito… hasta el día viernes. ¡Aijuepéte! ¿Tres días les tomaría escribir lo que improvisaron en unos pocos segundos?

¡Oh! ¡Cuanta capacidad tienen estos chicos!.

CÓMO SE HACE DESAPARECER UN EXPEDIENTE

Mientras el ex presidente de la aplanadora explicaba a la plenaria que el hace lo que quiere solo y que la Ley Orgánica se puede ir al carajo junto con todas las Comisiones asesoras, y que a nadie le importa lo que él haga porque a él no le importa tampoco lo que otros hagan… en medio de ese discurso quedó claro cómo funciona la HJM.

Y es en ese contexto que Ovidio el correligionario y amigo de bigote kandado con conocimiento de varios concejales confesos (porotea, kiñokis, el mudito) retenía determinados documentos y expedientes… en espera de que ¿suba el dólar? ¿mejoren las cotizaciones de la bolsa? O lo que honestamente se nos ocurra pensar.

Fue claro el abogado cocinero al contar que “el 80% de los expedientes” se van a legislación “por prelación”. De hecho se van a legislación y allí desaparecen como si fuera el triángulo de las Bermudas. La ley establece la prelación de las Comisiones Asesoras, pero lo quieren sacar de contexto para engañar a las personas.

La ley establece que ya en la primera sesión de la Junta Municipal, se eligen las Comisiones Asesoras y se establece el día y hora de las sesiones de la misma. La ley dice que primero se reune la Comisión de Legislación, pero no dice que los documentos quedan confiscados por esta comisión, sino que dice que luego (en otro horario) se reune la siguiente comisión: y ellos también pueden estudiar todos los documentos que quieran, tanto los entrados en la Junta como los que les corresponda como contralores que son de la municipalidad.

Pero lo que quieren hacernos creer algunos superconcejales  es que todo va a la primera comisión hasta que ellos quieran, entonces ¿qué hacen? Se instalan ellos en esa comisión y atajan todos los expedientes hasta el día del juicio final. ¡Ah! Y el presidente de dicha comisión siempre debe ser un socio. Antes Ovidio, ahora Hugo.

MAS PERDIDO QUE ENANO EN DESFILE

Mientras tanto, y ya que no estaba el cabezón, el que se ocupó del delirio semanal fue kiñokis. Aclaró que él estaba muy bien asesorado gracias a la Secretaría General (quizó decir Secretaria de la Junta) y que “ahora se cambió la Ley y nos queda claro que los expedientes no podemos retener por más de 15 días.

El honestísimo concejal no dijo “estudiar”, sino que dijo cláramente “retener”. ¿Otro sincericidio? Y ni siquiera estaba tan asesorado, porque su maestra y el colega cocinero tuvieron que retrucarle que en realidad podían retener hasta 60 días. “Aún así” siguió diciendo kiñokis yo trato de meter mi nariz en todo, porque todos somos responsables. (Querido ex intendente: los buitres no tienen nariz… tienen pico)

Luego en el colmo de la genialidad agregó que “…el dictámen de la comisión no es vinculante, porque acá (¿acá?) se resuelve todo”.  Y si el dictámen de la sesión no es vinculante ¿por qué se incluye en el “considerando”? Y si no es vinculante el trabajo de las Comisiones Asesoras ¿Por qué la Ley Orgánica Municipal las establece?

Y no solo la ley, porque como citó la concejala Luzbella, hasta la Cámara de Diputados sigue fielmente esos pasos de dictámen previo. Y si bien es cierto que la Plenaria puede resolver lo que quiere, también es cierto, señores kiñokis & asociados que ustedes deben –por ley- responder con sus bienes por sus actos legislativos ilegales.

UNICAMENTE EN SAN LORENZO

Elocuente fue también la concejala Luzbella cuando manifestó que “…no puedo compenetrarme a este (extraño) estilo en que se llevan a cabo las comisiones asesoras”. ¿Cómo 11 comisiones se van a reunir en un solo día, y en solo unas horas? Y fueron las palabras de una persona con experiencia en el Parlamento Nacional.

Fue categórica la concejal al afirmar que ella entendía la preocupación de su colega Myriam, y “que SOLO EN SAN LORENZO se llevan a cabo las reuniones de todas las comisiones asesoras en menos de medio día”.  Eso no ocurre en ningún otro municipio.

¡Son once comisiones! – Exclamó la concejala ante el silencio de todos los concejales. Y agregó que lo decía “… porque he visto en la Cámara de Diputados que cada comisión se reúne aparte y en una oficina. Hay que tener oficinas para las comisiones ¿Es dificil pedir esto a un municipio? Esta ciudad tiene 400 mil personas y un buen presupuesto”.  

“Deberíamos pensar en una mejor forma de reunir y estudiar TODOS los expedientes que entran en las comisiones. Es un poco dificil la forma en la que se está trabajando. Acá hay una mezcolanza que dificulta un poco el trabajo. Tenemos que tener a la vista todas las documentaciones”, terminó diciendo. (¿Se acaba la joda muchachos?).

YO SOY LA COMISIÓN, YO SOY LA JUNTA, YO SOY…

La Biblia dice que cuando un santo profeta le pregunto a Dios quién era ÉL, el Ser Supremo le respondió: “Yo Soy”. Bueno, parece que ahora, en San Lorenzo, al supremo Creador le apareció un serio rival: durante su disertación sobre “cómo debe ser un concejal”, el supremo pontífice de la aplanadora, dijo “Yo Soy” una docena de veces.

El omnisapiente sumo sacerdote de la Junta manifestó su disenso con las colegas que reclamaban el cumplimiento de la LEY. “Son los mismos expedientes para varias comisiones, todos los concejales somos miembros. Asi que cada presidente trae su expediente y deja sobre la mesa y cada concejal tiene su trabajo y su labor.”

“Entonces YO tengo que capacitarme personalmente, YO tengo que venir y YO tengo que ver cada expediente. Esa es MI tarea y si el colega no hace ese es su problema. Cada colega es responsable de si mismo. Y YO hago mi función, y si Juan o Pedro no hace su función o no viene o no le interesa, ese es el problema de Juan y de Pedro, no es mi problema. “

“SOY YO Osvaldo Gomez, vengo a mirar los espedientes, YO voy a hacer mi trabajo en forma personal, y por eso YO me quedo (solo) hasta las 4 o 5 de la tarde y mando a traer los expedientes, y YO veo si corresponde o no corresponde, si está o no está, si falta un documento o no le falta y automáticamente YO le digo al presidente y YO le envío una boletita a la secretaria donde dice aprobado.”

Terminó su sermón diciendo que “YO solo tengo que rendirle cuentas a la sociedad, a la comunidad y a quién me votó”. Y los humildes mortales nos preguntamos ¿Cuándo usted y sus acólitos han rendido alguna cuenta a alguien? Y mire que estamos muy interesados en ese momento que, indudáblemente, le va a llegar a todos ustedes.”

Seguro que de chiquito, ovaldito, se la pasaba jugando con  su yo-yo.

EN LAS CALLES MANDA CUALQUIERA

Mientras tanto, en las calles de nuestra ciudad, la prepotencia de algunos “empresaurios” es increíble. Según reiteradas quejas de los vecinos de la calle Fortín Arce, el personal de un boliche conocido como “Puerto Chopp” habría cerrado las veredas y la calle al todo tipo de tránsito: ni automóviles, ni peatones… solo clientes.

Acá se fueron al tacho las leyes y las ordenanzas de toda una ciudad ¿Y la Municipalidad? ¿Y la Policía Nacional? ¿Y el Ministerio Público? ¡Nada! Se cierra la calle y la vereda para que los borrachos puedan estar más cómodos. Ruido, cerveza y orín por todas partes. ¿Esa es la nueva ciudad que nos prometieron?

Y pensar que tanto burumbumbúm con su colorido lema “San Lorenzo, mi ciudad y mi pueblo”, que no pasa de un simple vyrorei. San Lorenzo no ha cambiado, mi ciudad ahora es propiedad privada de gente rara y prepotente, y mi pueblo se tiene que callar la boca y dar toda la vuelta a la manzana para poder entrar en su casa.

Cada vez esto se parece más a un pueblito del far west… y seguimos con la firme esperanza de que nuestro jóven intendente empiece a ponerse firme y a hacerse respetar. Tiene los medios, tiene la capacidad, tiene el poder.

¿Qué más te falta Felipito?

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