Atentado contra CKF, arma estaba cargada pero falló

Según la prensa argentina, el hombre se encontraba entre la multitud que aguardaba la llegada de la vicepresidenta Cristina Kirchner, en su domicilio del barrio porteño de Recoleta, luego se acercó y gatilló una pistola Bersa, calibre 380, pero la bala no salió. El atacante resultó ser, Fernando Andrés Sabag Montiel, un ciudadano de nacionalidad brasileña de 35 años.

La vicepresidenta salió ilesa luego de que fallara el arma que fue gatillada en la cabeza. El hecho creó conmoción en toda la argentina y a raíz del hecho, el presidente Alberto Kirchner, decretó feriado nacional para hoy viernes.

El episodio sucedió en la noche del jueves, cuando la dos veces jefa del Estado regresaba a su casa y, en medio del recibimiento que desde la semana pasada le brindan sus seguidores en el barrio de Recoleta tras el pedido de condena que pesa en su contra, una persona sacó un arma con la que le apuntó a la cabeza. El agresor disparó, pero la bala no salió.

La vicepresidenta resultó ilesa, y poco después del ataque se recluyó en su departamento porteño de la esquina de Juncal y Uruguay. Luego y mientras la conmoción por lo sucedido aún no cesaba, Cristina Kirchner volvió a saludar a sus seguidores e ingresó en el edificio donde reside.

El atacante de la vicepresidenta fue identificado como Fernando Andrés Sabag Montiel, de 35 años. Se trata de un ciudadano de nacionalidad brasileña que tiene antecedentes por portación de armas. Quedó detenido y está alojado en la alcaldía de los Tribunales de Comodoro Py. De acuerdo con lo dicho por el Ministerio de Seguridad de la Nación, el arma secuestrada es una Bersa calibre 32, que tenía cinco balas en su cargador.

La información con la primera imagen de la agresión fue dada a conocer por la Televisión Pública, en un flash informativo urgente emitido pasadas las 21.

En ese registro audiovisual se observa cómo el sujeto se acerca de repente a centímetros de la humanidad de la vicepresidenta y extiende su mano derecha portando el arma, que terminó siendo gatillada. La secuencia es rapidísima, de apenas unos segundos: Cristina Kirchner observa el arma y agacha la cabeza. De inmediato, el agresor es detenido por militantes kirchneristas y por la custodia vicepresidencial, que está fuertemente cuestionada por su accionar.

“DISCURSO DEL ODIO” Y FERIADO

En la noche de el jueves y tras el hecho, el presidente Alberto Fernández habló en cadena nacional. Aseguró que el ataque que recibió su vice es el “más grave que ha sucedido desde que hemos recuperado nuestra democracia”.

“Cristina permanece con vida porque, por una razón todavía no confirmada técnicamente, el arma que contaba con cinco balas no se disparó pese a haber sido gatillada”, ahondó el jefe del Estado.

En una decisión que rápidamente fue cuestionada por la oposición, Alberto Fernández anunció que el día viernes será feriado nacional “para permitir que el pueblo se manifieste en paz”. Se esperan para el día viernes concentraciones masivas y la movilización del oficialismo.

En otro tramo de su discurso, el Presidente habló de “recuperar la convivencia democrática” y apuntó contra la oposición, los medios y la Justicia por esparcir el “discurso del odio”.

“Estamos obligados a recuperar la convivencia democrática que se ha quebrado por el discurso del odio que se ha esparcido desde diferentes espacios políticos, judiciales y mediáticos de la sociedad argentina. Podemos disentir, podemos tener profundos desacuerdos, pero en una sociedad democrática los discursos que promueven el odio no pueden tener lugar porque engendran violencia y no hay ninguna posibilidad de que la violencia conviva con la democracia”, aseveró.

Fernández contó también que se había comunicado con la jueza a cargo de la investigación. También trascendió que hubo un llamado telefónico entre el Presidente y la vice, pero el mandatario no lo explicitó al hablar en cadena nacional.

REPUDIO GENERALIZADO

A poco de sucedido el atentado contra la vicepresidenta, desde todo el arco político hubo comunicados y mensajes en las redes sociales en contra de lo acontecido.

El expresidente Mauricio Macri tuiteó: “Mi repudio absoluto al ataque sufrido por Cristina Kirchner que afortunadamente no ha tenido consecuencias para la vicepresidenta”.

La Confederación General de Trabajadores (CGT) y decenas de gremios se sumaron al rechazo por lo sucedido. Algunos de ellos hablaron de “violencia política” y plantearon la necesidad de realizar una jornada de protesta que, dijeron, comenzarán a delinear desde el mismo viernes.

“No la matan porque Dios es grande”, dijo, por su parte, el senador José Mayans, titular del bloque del Frente de Todos en la Cámara Alta.

Senadores y diputados del oficialismo y de la oposición se reunieron cerca de la medianoche en el Congreso, desde donde emitieron un mensaje de repudio.

Cecilia Moreau, presidenta de la Cámara de Diputados, informó que se constituirá un “comisión investigadora del atentado” contra la vicepresidenta.

En tanto, dirigentes de varios países, especialmente de América latina, se pronunciaron en redes tras el ataque contra la vice. Así lo hicieron Evo Morales, Inácio Lula da Silva y Rafael Correa. El embajador estadounidense, Marc Stanley, tuiteó: “Estamos aliviados de saber que la vicepresidenta @CFKArgentina esté bien. Estados Unidos se une a la Argentina y a toda la gente pacífica en el rechazo a la violencia, al extremismo y al odio en todas partes”.

Quien se salió de la línea de repudio opositor fue Patricia Bullrich, presidenta del PRO. La exministra de Seguridad macrista y precandidata presidencial fue la primera del espectro opositor en cuestionar al Presidente tras su cadena nacional.

“El Presidente está jugando con fuego: en vez de investigar seriamente un hecho de gravedad, acusa a la oposición y a la prensa, y decreta un feriado para movilizar militantes. Convierte un acto de violencia individual en una jugada política. Lamentable”, se diferenció Bullrich.

Fuente: La voz.com.ar