Debido al confinamiento por la pandemia por coronavirus, la convivencia en los hogares ha demostrado sus consecuencias en el aspecto de violencia intrafamiliar; y no solo por el encierro, sino por la pérdida de trabajo, pérdida del nivel adquisitivo, las nuevas modalidades de trabajo y educación a distancia, como primeros factores que impactaron en la vida de las personas, como también en la salud en forma general. En ese contexto, la Lic. Mirtha Maldonado, psicóloga del Hospital de Clínicas, refiere que es fundamental implementar acciones para revertir esta situación, y más aun en estos tiempos.
“Como punto de partida debemos tener en cuenta que es sumamente importante que las personas puedan escuchar y hacer caso a lo que sienten y no dejarlo pasar; reaccionar a los malestares y dificultades que manifiesta el organismo, que puede estar alertando sobre la necesidad de ayuda profesional”
La violencia familiar es una realidad en nuestro país, sobre todo en el confinamiento provocado por la pandemia del virus Covid-19. El encierro, la restricción de movilidad, la incertidumbre, el estrés y la presión por la situación económica causaron situaciones difíciles para los miembros de la familia en distintos entornos.
“Si hablamos de violencia doméstica también hablamos de relaciones de poder que se establecen en relaciones que ya existían antes de la pandemia y que se exacerbaron en la pandemia, en situaciones que ya existían; también se observan casos de personas que repentinamente se expresan de manera intensa con los miembros de su familia; es importante mencionar que las personas que son protectoras en esta situación, extreman sus cuidados en su ambiente, su entorno; y la situación, el contexto puede hacer que detonen situaciones en personas que no eran violentas”
La violencia, ¿es transmisible?
La especialista del Dpto. de Psicología, indica que los modelos familiares son fuertes. Si una persona fue educada con pautas de crianza con normas de castigo físico, descalificación y falta de respeto a la integridad de cada miembro, existen probabilidades de que en el futuro exprese reacciones del mismo tipo o busque relacionarse con personas similares.
“Es altamente probable de que las personas víctimas de violencia a futuro puedan seguir perpetuando la violencia o buscar modelos de pareja similares. El maltrato hacia miembros de la familia genera mucho daño”
¿Qué hacer cuando hay un malestar psicológico?
A pesar de que es una situación difícil y complicada muchas veces para el que lo padece, generalmente las mujeres, es necesario buscar ayuda; porque de lo contrario el organismo seguirá debilitándose.
La salud mental es considerada el pilar central de la salud de las personas. Es aconsejable reducir todo lo que se pueda la exposición de informaciones negativas. El contexto es doloroso, pero es necesario ponerle límites para no aumentar las sensaciones que provoca la situación.
“La violencia intrafamiliar, ese modelo que se impone en la familia, que se transmite a los hijos, esta violencia produce daño inmediato y a largo plazo; las personas que fueron víctimas de maltrato intrafamiliar, tanto hombres como mujeres llevan esa secuela para siempre, en el sentido de que uno nunca se olvida de aquellas situaciones de maltrato, y si vino de sus padres con mayor razón. La violencia deja secuelas”
Según datos del Ministerio de la Mujer, en los meses de enero, febrero y marzo las cifras de llamadas de emergencia sobrepasaron las dos mil; lo que señala que la pandemia ha exacerbado los casos de maltrato a las mujeres.
Ante la necesidad, el Dpto. de Psicología del Hospital de Clínicas brinda asistencia de manera virtual y en el caso de requerimiento, se indica consultorio presencial, en horarios de la mañana y tarde. Los procesos cuentan con el apoyo del Dpto. de Psiquiatría, para los casos de medicación farmacológica.
Los agendamientos para las consultas se realizan de 07:00 a 12:00 hs. por secretaria o a través de la línea habilitada (0962) 440004.
