Los heridos son de 13, 15, 16, 16, 17 y 18 años, algunos con residencia en Laurelty y otros en Calleí barrio Virgen de los Remedios, cada moto involucrado en el accidente tenía tres tripulantes a bordo.

El hecho ocurrió poco después de la salida del turno noche del colegio Sgto. Cándido Silva de San Lorenzo a media cuadra de la institución escolar. Según el parte policial, luego de las 21:00 Hs del martes 28 pasado, varias motocicletas algunas de ellas con estudiantes menores a bordo, circulaban a gran velocidad sobre la calle Virgilio Roa, algunos en bajada dirección (Este) y otros en sentido contrario, al llegar a la calle Pedro de Mestral dos motocicletas chocaron frontalmente dejando a los seis integrantes de las motos desparramados por el empedrado.
Una vecina del lugar comentó que escucharon el ruido del choque y al salir vieron a los jóvenes tirados en el empedrado dando muestras de dolor, luego llamaron a la policía y bomberos quienes acudieron rápidamente para ayudar a las víctimas y su posterior traslado al Hospital Materno Infantil de Calleí.
Las motocicletas involucradas son de la marca Kenton 150 CC sin chapa y otra de la marca Yamazuki 125 CC con chapa número 088 BCT ambos guiados por menores de edad.
Tres de los accidentados aun están internados, dos de ellos en estado de observación.
PIDEN LOMOS DE BURRO
El profesor Ismael Vera Franco, director del colegio Sgto Cándido Silva de Lauerlty, manifestó sobre la necesidad de la colocación de lomos de burro sobre ambas calles paralelas que pasan a los costados del colegio, de modo a evitar la excesiva velocidad que imprimen los conductores de autos y motocicletas, ya que la pendiente es bastante pronunciada desde la ruta Eugenio A Garay y se extiende por aproximadamente siete cuadras. “la preocupación de vecinos y la comunidad educativa es sobre la falta de lomos de burros sobre las dos calles que pasan frente al colegio, ya que entrando de la ruta Eugenio A Garay la gente empieza a apretar el acelerador aprovechando la bajada y eso es como una invitación para los jóvenes motociclistas quienes por la noche se especializan en las jugadas de carrera”.
El docente también manifestó su preocupación respecto a la falta de semáforos u otros tipos de seguridad para los numerosos niños y jóvenes que todos los días deben cruzar la peligrosa ruta Eugenio A Garay a la altura de Virgilio Roa para llegar a la escuela y colegio de la zona.