Desprestigio intacto. La muy desgastada reputación de la Honorable Junta Municipal de San Lorenzo cada vez se agrava más, antes que recuperar la credibilidad de la ciudadanía quienes les paga el jugoso salario que tienen. Lo último que deja serias dudas en cuanto a la honorabilidad de los concejales fue el “ñembotavy” generalizado en relación al hecho de la sustracción del celular del joven Pastor Filartiga en plena sala de sesiones que fue el pasado miércoles 06 de febrero.
“Ñembotavy”. Lo preocupante es que hasta ahora el presidente de la Junta Municipal, Carlos Ferreira ni sus colegas se mostraron preocupados por la situación. Por su parte el titular del legislativo comunal lo único que demostró mediante una publicación en “espacio reservado” fue su desinterés hacia el hecho de sustracción del celular del ciudadano, ya que en dicho escrito no hace mención directa al posible ilícito cometido mediante la ya mencionada sustracción del celular.
Todo sale a la luz. No obstante, hoy día, la muy accesible información instantánea existente en las redes sociales y los cada vez más numerosos anónimos colaboradores que dan muchas veces “la precisa” en lo referente al campo municipal y político, ayudaron a determinar al grupo “Che Kuerai” que quien sustrajo el aparato telefónico sería un tal Luis Duvivier, que a la vez estaría oficiando de chofer secretario del edil Ferreira.
Obligación de los Honorables. Lo cierto y lo concreto es que los miembros de la Honorable Junta Municipal están en la obligación de dar a conocer el nombre y apellido del autor de la sustracción del celular, si es o no funcionario municipal y/o a cargo de quien está el responsable del hecho, e incluso, acercar el informe a la fiscalía.
Méritos para el NO. La pregunta que también surge es ¿A alguno de los once concejales restantes, le interesó aclarar el hecho de sustracción en plena sala de sesiones y frente a sus ojos?, o ¿Todos recurren a la famosa frase de “la ley del ñembotavy?. En este último caso es bueno recordar que “guardar silencio respecto a algún delito de sustracción es ser cómplice de la impunidad, y eso no es para nada honorable”, además la práctica de encubrimiento de este tipo de hechos debería aumentar “puntos” para apuntar al casillero con la palabra NO de la papeleta en las próximas elecciones municipales.
@VargasDanielPy
