Hospital de Clínicas ofrece consultorio de flebología que atienden todos los días en consultorio

El Prof. Dr. Víctor Canata, flebólogo del Hospital de Clínicas de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNA, señaló que va en aumento el número de atenciones por várices en consultorio. La mayoría de los casos se debe a infecciones,  refirió que el 30% es decir, 3 de los 10 pacientes atendidos diariamente en consultorio de flebología, presentan infección en las várices, siendo los otros casos atendidos por úlcera varicosa.

Se denominan varices a la dilatación, elongación  y tortuosidad de las venas que se encuentran en el miembro inferior y que se ven como unas salientes o como unos gusanos que se aparecen a nivel de las piernas en forma longitudinal y vertical en todas las aéreas.

Otro tipo de infección es la ulcera varicosa, una herida a nivel de los miembros inferiores  que se ubica por delante del talón o fuera o parte más distal de la vena que se produce por la falta de circulación en esa área y se vuelve crónica, produce mucho dolor y cada vez se va agrietando, en relación al tiempo que se deja para consultar y es una situación grave.

El especialista manifestó que en nuestro país tenemos una gran casuística de várices debido a la temperatura, el calor, la multiparidad y el factor hereditario que son los factores más importantes por las cuales aparecen.

Sobre las profesiones más predispuestas a padecer de várices son las que requieren de estar mucho tiempo de pie, como los mozos, los que están mucho tiempo expuestos a las fuentes de calor como los parrilleros, las cocineras, y todas aquellas personas que tengan el factor genético o factor hereditario lo cual suma  padre y madre al mismo tiempo con várices.

Explicó que cuando el factor hereditario padre y madre se presenten con várices entonces el progenitor tienen más de 80 % de posibilidad que tenga várices. En tanto cuando el caso se en que uno solo de los miembros de la familia tengan várices, sea padre o madre, baja a 40%, o sea que la posibilidad de trasmisión de padre a hijo es muy alta.

En segundo lugar los factores más importantes para la aparición de várices es la multiparidad (muchos embarazos), que producen sobrecarga venosa más los cambios hormonales, haciendo que la aparición de venas vaya aumentando, “Generalmente los flebólogos solemos decir que por cada hijo una várice que aparece”.

Otro factor sería la obesidad, el sedentarismo, la mala alimentación, ya que la dieta paraguaya es muy alta en carbohidratos y carne muy grasosa. Por lo que el especialista recomendó cambiar de hábitos por una alimentación más balanceada, con frutas, verduras, hortalizas, sumado al pollo y pescado a nuestra alimentación debido a que poseen otro tipo de grasas más primordiales para el organismo.

En cuanto a la predisposición de aparición de venas varicosas por sexo, manifestó que la diferencia es de 4 a 1, aunque admitió que actualmente se ha observado que prácticamente la misma cantidad de hombres como de mujeres acuden a consultorios externos de flebología. Aunque las mujeres consultan de manera más oportuna, la mayoría de los casos por factores estéticos.

“Las pacientes llegan a consultorio con una pequeña venita que salta a nivel de la pierna, de la rodilla, o a nivel del muslo, que le impide a esa persona utilizar una mini o short que quiera vestir en algún momento especial”, citó.

En tanto los varones acuden tardíamente, primero porque son más dejados en relación a su salud; generalmente dejan que la vena se dilate además del elemento “vello”, que les sirve de camuflaje. “El hombre tienen vellos corporales por toda la pierna entonces la vena no se ve, las arañitas no se notan porque el vello hace de camuflaje  entonces nadie se fija y cuando el paciente se percata de eso resulta que la vena ya es gruesa, dilatada, que ha producido ya algún tipo de inconveniente llegando a generar úlceras”.

 Indicó que en la actualidad se está cambiando el paradigma  en cuanto a tratamiento de várices, “Ya las comenzamos a tratar con venotónicos, es decir, elementos con medias o elementos naturales sumados al cambio en el estilo de vida; para que esa válvula que no está funcionando pueda restablecerse lo más pronto posible. Si eso no ocurre pasamos a la segunda etapa que sería un tratamiento intervencionista, que va directo a la eliminación de la várice”.

En cuanto a la parte intervencionista también se han producido cambios en el abordaje quirúrgico “Ahora estamos más abocados a la realización de cirugías, con heridas cada vez más pequeñas o tratamos de eliminar las várices de la forma menos invasiva posible”.

Por ejemplo, uno de los tratamientos en boga son los realizados con Láser, una luz física que tiene la posibilidad de foto coagular la vena al atravesar la pierna y de alguna forma eliminarla por la proyección de un as de luz que tiene una  sensibilidad especial al cromóforo o al glóbulo rojo, es decir ataca solamente en el lugar en donde hay sangre para eliminarla, desapareciendo así la várice sin ningún inconveniente y de la manera más rápida posible.

“En eso estamos encaminados ahora acá el Hospital de Clínicas, para que el paciente se recupere lo más pronto posible, sin ningún tipo de efecto colateral y que pueda regresar rápidamente a sus actividades o reintegrarse nuevamente al trabajo”.

En cuanto a las arañitas, el Prof. Dr. Víctor Canata mencionó que cuando un paciente viene a consultar, primeramente deben conocer el motivo real de la paciente que acude a consultorio.  Preguntarle si duele, si molesta o estéticamente le impide realizar la actividad normal porque su pierna tiene mucha vena y es ahí donde el médico debe indicar el tratamiento con láser.

Dr. Víctor Canata
Dr. Víctor Canata

El láser es una luz que se dispara, es caliente y atraviesa la piel eliminando las varices. Es totalmente diferente al tratamiento con las inyecciones, donde al paciente se le debía vendar; en tanto, con el láser se le coloca una crema, se le aplica una pequeña anestesia local y a continuación se dispara el equipo; que como es un elemento físico no tiene efectos colaterales, no necesita reposo y no necesita venda. El paciente se va sin ningún inconveniente a su casa y sin estar vendado; regresa para su sesión, que son de una a dos veces por semana para que se pueda verificar que tiene un efecto importante en el paciente y se van sumando las sesiones y una vez que se llegan a las 5 o 10 sesiones prácticamente un 80 a 90 %  de las varices, venitas o arañitas del paciente se encuentran totalmente eliminadas”.

Explicó que en este momento están queriendo gerenciar un equipo de láser para así poder contar con el quipo en el Hospital de Clínicas lo más pronto posible.

Las varices pueden aparecer en cualquier  tipo de piel, la diferencia es que en la piel más oscura los efectos colaterales son mayores, como la de híper pigmentar o realizar algún cambio en su coloración que estéticamente es problemática. Así también, aquellos pacientes con varices o arañitas que se rompen por cualquier razón.

Cabe destacar que el Hospital de Clínicas cuenta con un plantel de especialistas flebólogos que atienden todos los días en consultorio, que cubren el área de flebología, cirugía vascular y pie diabético con alto nivel de asistencia.

Adelantó que se encuentran trabajando en un proyecto de postrado para la especialidad de flebología y así tener residentes y médicos especialistas con capacidad y un nivel de entrenamiento elevadamente aceptable para un buen ejercicio de la medicina en lo que refiere a várices, a nivel país.

Fuente: UNA