Por Claudia Meaurio
Ante la llegada de los festejos de fin de año, profesionales de salud del Hospital de Clínicas de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNA aconsejan evitar transgresiones alimentarias y de bebidas alcohólicas.
La Dra. Tania Hoberuk, Clínica Endocrinóloga del Servicios de Urgencias Adultos explicó que lo ideal es que todos se cuiden, en especial aquellos pacientes diabéticos, los conocidos hipertensos, con dislipidemias que son colesterol y triglicéridos altos y los obesos, ya que son pacientes que tienen de 5 a 10 veces más posibilidades, de sufrir una crisis hipertensiva y con ello se puede llegar a un infarto, los accidentes cerebros vasculares más conocido como derrame cerebral.
También los pacientes con dislipidemia (pacientes que sufren de aumento de nivel de grasa en la sangre) tienen mucho riesgo de hacer politransgresiones: pancreatitis aguda que es un cuadro muy grave con alta mortalidad, entonces estos son los pacientes que deben tratar de alimentarse bien y no exagerar o salir de esa rutina.
“No abusar con la sal, con todo lo que sea grasa, frituras y el alcohol, ya que contiene mucho carbohidrato. Lo que podrían es tomar una copa de vino y no tomar cerveza, sidra sobre todo los diabéticos. En caso de los más jóvenes es importante no abusar con las bebidas alcohólicas, ya que el exceso podría llevar a coma alcohólica y que puede inclusos producirse la muerte en casos más graves; estos son casos que aparecen en mayor número luego de las fiestas”, indicó la profesional.
Recomendó a la vez, como hace mucho calor, no utilizar mayonesas, debido a que suelen descomponerse y acarrean muchos cuadros de gastroenteritis después de las fiestas de fin de año, por lo que es importante tratar de conservar bien las comidas.
Instó además a que acudan a las consultas ante cualquier síntoma. Cuidarse de los golpes de calor, utilizar remeras claras, protector solar, estar bien hidratados, tomar de dos a tres litros de agua al día, no salir a toda hora del aire al calor.
Por su parte, la Lic. Rocío Arguello, Nutricionista de la Unidad de Obesidad, explicó que la idea es que los pacientes no se olviden de una alimentación saludable y de la actividad física, sobre todo en estas fechas donde abundan las comidas y bebidas alcohólicas.
Brindó también algunas sugerencias en cuanto a las porciones que debe contener un plato de comida: “generalmente están las carnes que son frías, entonces se puede servir a la porción de carne, que es el cuarto del plato o el tamaño de la palma de la mano, después están los hidratos de carbono como las ensaladas de papas, de arroz, chipa guasú, sopa paraguaya, entonces lo mejor es optar por uno de ellos y saber también que es el cuarto de la medida de un plato y hacer ensaladas de hojas verdes grandes; en cuanto a los condimentos es preferible que cada persona sazone a su gusto, no usar tanta sal”.
En cuanto a los aderezos como la mayonesa, salsas, cremas de leche, el típico vitel toné, tratar de alivianar un poco usando guarniciones dietéticas, quesos cremas en vez de la crema de leche y saber que se tiene que preparar lo justo y necesario atendiendo el calor por lo que a consecuencias de la descomposición de los alimentos aparecen las intoxicaciones, sobre todo cuando hay mucha grasa y se quedan a temperatura ambiente. Es importante cocinar para el día y que termine en el día. El aceite de oliva es muy saludable, los ácidos grasos que tienen son buenos para el corazón, disminuyen el colesterol malo, aumentan el bueno, se utiliza sobre todo para personas con enfermedades cardiovasculares.
En cuanto a los postres, indicó que lo ideal es que sean frutas, los más fresco, que devuelven las vitaminas y minerales que se pierden con la transpiración, entonces se puede optar por ensaladas de frutas o hacer algún postre como brochette de frutas, salsas naturales, licuados con yogur o con gelatina dietética que sea fresco y saludable.
“Las frutas y las verduras dan saciedad por la fibra que tienen, están más tiempo en el estómago, por lo tanto dan más saciedad. Por eso se recomienda tener porciones grandes de frutas y verduras con las comidas”.
Así también, la Lic. Gisela Bernal, Psicóloga Clínica de la Unidad de Obesidad explicó: “Lo que hacemos en el Servicio es ver el nivel de ansiedad y depresión en los pacientes. Generalmente, los pacientes que tiene sobrepeso, son muy ansiosos o tienen problemas depresivos. Lo que hacemos en la Unidad es ver cuál de los dos síntomas es el que predomina”.
Indicó que los ansiosos comen a cada hora y no saben cómo manejar y se dan los atracones; así como los depresivos que buscan en todo momento la comida y ven como refugio consumir en exceso. En estos casos es importante el acompañamiento familiar, ya que es fundamental con estos tipos de pacientes, sobre todo en estas fiestas uno come en cantidad y pueden darse las gulas.
En relación al promedio de edades, la profesional manifestó que existen pacientes de 18 a 60 años; generalmente los pacientes entre 45 para arriba son los que tienen mayor obesidad y síntomas depresivos y ansiedad.
Finalmente, para tratar estos tipos de pacientes, los mismos deben recurrir a la Unidad para una evaluación, a modo de conocer con mayor precisión si existe nivel de ansiedad o depresión; el segundo paso sería consultar con el psiquiatra, que también se encuentra prestando servicio en la Unidad, para ver si posee algún trastorno y se inicia la terapia de acuerdo a la recomendación del médico en cuanto a la medicación y la parte psicológica con terapias cognitivas conductual donde el paciente hace el autoregistro de todo aquello que come, que piensa o siente.
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