Diferentes posturas se han suscitado desde que el Matadero Municipal que funciona en Calle´í y que fuera cerrado por la contaminación al entorno y en especial al arroyo San Lorenzo, quiere ser reabierto por las autoridades municipales, una vez que la SEAM verifique el cumplimento de las reglas ambientales. Por su parte, los vecinos del Barrio San Juan, donde funciona el local, están en absoluto desacuerdo con la idea y exigen su clausura definitiva y la demolición inmediata para la ejecución a corto plazo de un proyecto que beneficie a la comunidad. Los pobladores están respaldados por el Consejo de Aguas de las Cuencas Hídricas del arroyo San Lorenzo (CACHASL), organismo que procura recuperar la cuenca del arroyo.
El intendente Albino Ferrer, en conversación con este medio, manifestó que “se está invirtiendo dinero para su remodelación y apunta a ser uno de los Mataderos más hermosos del Departamento Central. Se está poniendo a punto para cumplir con las normas que exige la SEAM. Están solucionando los problemas de la pileta de tratamiento, en donde tengo entendido que gastaron más de 500 millones de guaraníes, además tengo información de que la empresa responsable del alquiler ya firmó un contrato con otra empresa que se dedica a comprar la sangre, inclusive esta pileta no se utilizará porque todo irá a un recipiente para su posterior traslado”.
Asimismo dijo que lo más importante es conseguir fuentes de trabajo, “tenemos más de 70 o 80 personas que viven del faenamiento y venta de menudencias del Matadero de San Lorenzo y así han criado a sus hijos”.
Contestó a los reclamos de la Dra. Brunelli afirmando que “a ella y a su familia no les falta ese pan de cada día, como la gente humilde que solo busca comer diariamente, entonces, ¿qué le importa si en otro hogar está faltando? Ella solo busca los beneficios a nivel personal”.
Buscando ambas caras del conflicto, conversamos con la Dra. Brunelli, quien dijo “la situación del Matadero es sumamente complicada porque ya existen intervenciones judiciales. Definitivamente no es el lugar adecuado para que funcione”.
Igualmente, habló sobre los motivos principales que existen para no habilitar el predio: el plan de ordenamiento territorial, la instancia judicial, y el rechazo de los vecinos. “Existe un plan de ordenamiento territorial, que está aprobado en general y no en particular, o sea, de acuerdo a la cara del cliente. En ese plan consta que 100 metros a ambas márgenes del arroyo deben ser áreas verdes, donde solo se pueden realizar emprendimientos que no afecten al medio ambiente y al paisajismo. De acuerdo a ese plan de ordenamiento, debe existir una zona específica dedicada a las empresas con efluentes como el Matadero y otros”
También comentó sobre el problema judicial: “la instancia judicial tiene una suspensión condicional de procedimiento, hay un ítem que obliga a la Municipalidad a destinar el actual predio del Matadero de San Lorenzo para fines de interés social para la comunidad. El expediente nunca se remitió al Juzgado de Ejecución. Quedó solo en la primera instancia en lo Penal. Como ciudadanos confiamos en la persona del intendente que iba a dar cumplimiento y seguimiento a las medidas judiciales, porque después de todo somos ciudadanos comunes y las autoridades correspondientes deben velar por el cumplimiento de la Ley”.
Por otra parte, comentó Brunelli, están los vecinos del lugar, que han presentado una nota a la Comuna exigiendo la clausura definitiva del lugar. Ellos han sufrido momentos desagradables cuando el Matadero estaba en funcionamiento. No solo por el hecho de verter sangre de los animales al arroyo, sino por el olor nauseabundo y la proliferación de moscas que no dejaban siquiera comer ni salir al patio a los pobladores. “Estos vecinos hace un año viven en otro ambiente, tranquilos. Entonces hay suficientes razones para no abrir el Matadero en ese lugar. Como Consejo de Aguas lo que hacemos es apoyar a la Comisión Vecinal “San Juan Bautista” y también presentamos nuestra objeción a la SEAM”, afirmó la doctora.
Proyectos dispares
Este tema ya ha llegado a la sesión de Junta Municipal, en donde también se encontraron posturas totalmente dispares. Por una parte, el concejal liberal Osvaldo Gómez presentó un proyecto que busca utilizar el predio del Matadero como un centro de enseñanza de oficios de mandos medios en convenio con otras entidades para dar oportunidad a jóvenes que desean formarse, pues según la resolución judicial que suspendía el Matadero, al predio se le debe dar un fin que beneficie a la comunidad. Fue aprobado el proyecto, pero no así el lugar donde funcionaría, ya que a opinión otros colegas colorados, “existen otros lugares donde puede funcionar el centro de capacitación”.
Minutos más tarde, grande fue la sorpresa para muchos concejales, pues el edil Ignacio Brítez presentó una Minuta pidiendo la inmediata apertura del Matadero, en razón de que hay muchos trabajadores que necesitan de ese medio para sustentar a sus familias y la Comuna pierde ingresos tributarios. Además, dijo en tono de sorna: “No sabemos si el residuo es el que va a contaminar al arroyo o el arroyo al residuo”.
Ramón Gill manifestó su desacuerdo con el proyecto, pues es sabido el daño que produce al medio ambiente y la planta de tratamiento no está bien acondicionada: “para eso falta una inversión de US$ 1 millón y no creo que los empresarios ni la Municipalidad tengan ese monto para invertir”.
Los liberales no ocultaron su desconcierto y Luis F. Franco dijo: “Con razón que no se quiere habilitar allí el centro de enseñanza, porque pensaban habilitar el Matadero. Si nosotros encontramos un arroyo sucio, no quiere decir que debemos contaminarlo más. Es muy importante darles fuente de trabajo a nuestros vecinos, pero no es nuestra función primordial. Para eso hay otros lugares donde puede funcionar el Matadero, un lugar que no esté tan poblado”.
El concejal Nelson Peralta, abriendo el paraguas ante cualquier tipo de conclusiones, manifestó: “yo estuve en contra del proyecto de Osvaldo en que funcione en la Matadería, no porque sabía del proyecto de Ignacio, sino porque se gastará mucho dinero que puede utilizarse en otra cosa”. Finalmente, el proyecto de Ignacio Brítez fue derivado a comisión y se solicitó un pedido de informe al Ejecutivo sobre la situación judicial del caso.
Mientras tanto, la incertidumbre sigue para los pobladores y las organizaciones que se oponen a la apertura del local, que solo ha traído contaminación y malestar abanderados bajo el trabajo y la condición humilde de los trabajadores, siendo que existen otras vías para generar fuente de ingreso, pero que no dañen al medio ambiente. En tanto, en el Poder Legislativo se nota una total falta de coordinación y en el Poder Ejecutivo, la desidia al hacer caso omiso a los pobladores del barrio San Juan y seguir muy campantes en llevar adelante el cuestionado proyecto.
