Mbeguemí Online

A pesar de que San Lorenzo y el Paraguay están en plena sequía, por la muni pareciera que llueve todo el tiempo. Pero no llueve agua… ¡plata es lo que llueve!

Lastimosamente nada de lo que llueve (o muy poco) termina “mojando las necesidades de la población”, parece que TODO LO QUE ENTRA se queda nomás en la “honorable institución”.

De tanta$ agua$ que $e e$tán juntando, el palacete ya se está convirtiendo en una auténtica pecera. Más que pecera… a estas alturas del año ya se está convirtiendo en un ACUARIO.

¿Será por eso que lo construyeron todito de vidrio?

Habría que promocionar el turismo. Un acuario es algo que le gusta a la gente: por ejemplo tenemos el pulpo “Odix”, una variedad de cefalópodo de la especie de las KOMI-LONAS. Especie que se caracteriza por su abundancia de carnes en la juventud, pero que en la vejez comienza a acumular fierros en su estómago y se queda piru’i.

Pero este pulpo es un bicho con muchos tentáculos: agarra de todo. Es un depredador que se alimenta de royaltíes, fonacides, recapados, ciclovías, casetas, y plazas. Su alimento favorito son las truchas (las OBRAS truchas).

Otro animal interesante es una nueva variedad de manguruyú local: el “MONDARUYÚ KIÑOKIS”. Se lo conoce por ser un pez no muy grande, de aspecto macilento, pero que devora grandes cantidades de presupuesto. A pesar de tener el cuerpo chico, tiene una boca enorme (para poder morfarse todo lo que encuentra) se creía que  le gustaba vivir en el fondo del acuario, pero en realidad lo que le gusta es vivir de los “fondos” municipales.

Así como el tiburón tiene sus mascotas (las rémoras), el mondaruyú kiñokis tiene sus propios parásitos: uno de ellos es el SAPITO GREÑUDO, una variedad de batracio urbano que siempre anda alrededor del kiñokis lamiéndole las aletas. Otro parásito del kiñokis es la RANA SOMBRERO (su nombre científico es “Porotea”), esta rana se alimenta de tierra y se le reconoce por su ruidoso canto (AÑARAKÓ PE GUARÉ).

La “porotea” tiene su nombre científico del poroto. Y es que al igual que el Kumandá no sirve más que para echar pedos.

Alrededor de “mondaruyú kiñokis” hay una gran cantidad de parásitos: lombrices, babosas, cangrejos y caracoles que lo rodean para alimentarse de las migajas de presupuesto que se caen al GRAN ACUARIO cuando el kiñokis se está alimentando. A estos bichos se les llama científicamente “DIRE-TORES” y andan por las negras aguas de la ciudad. (Aunque cuando la gente los ve, los llama ndera kores, en idioma guaraní claro)   

Uno de los grandes depredadores del acuario comunal es el TIBURÓN CANDADO, un pescado que solo es peligroso dentro del recinto, porque en otras aguas suele ser muy tímido y huye. Le tiene terror a los cardúmenes de mojarritas y cualquier tipo de manifestación. Este pez tiene también un sonido que lo caracteriza: siempre repite ¡Aprobado! ¡Aprobado! ¡Aprobado!

El pacú Nvidio. Pescado de escamas azules, de cuerpo redondeado y cabeza brillante como un foquito led. Suele merodear por los profundos abismos usurarios (o sea las cloacas de la ciudad) también le gustan los yuyitos del fondo: usurita, conspirata, koimita, porcentaje y propinita. El pacú Nvidio anda en cardumen con varios ejemplares de Pez-planilla.

No solo peces se pueden apreciar en el ACUARIO COMUNAL. También hay extrañas plantas acuáticas como por ejemplo el CAMALOTE TRANSERO, planta de acuario cuyas hojas son verdes pero tiene la habilidad de cambiar de color para irse a las aguas que más le convienen, ya sea en el río colorado, en el riacho verde, o en la laguna azul . El camalote es una planta trepadora que les tranca a los pescaditos hasta estos que le dan lo que pide.    

El PESCABÚS, también llamado “pez interno”, es conocido porque siempre anda recorriendo el acuario en busca de nuevos itinerarios para nadar. Les cierra el paso a los demás pescados, pisotea a las pobres tortugas, y si algún pececito dice algo, lo patotea. Le gusta atrapar a otros y meterlos en latas como si fueran sardinas. Los pescadores afirman que se lo puede pescar con cualquier liñada 6.

Otra atracción del acuario es el PEZ PAYASO. Es un extraño animal acuático que tiene una gran cabeza. También se le conoce como PEZ LORO, ya que habla mucho. El PEZ PAYASO tiene la habilidad de hacer que las personas que lo escuchan se duerman. El ataque del pez payazo consiste en hacer reventar a sus enemigos: les habla, les habla y les habla, hasta que les revienta la cabeza. Hasta ahora ningún científico pudo entender o traducir los ruidos del PEZ PAYASO.

PEZ BANANA. No hay que engañarse por el nombre, porque aunque se llame pez banana, no es comestible: en realidad nadie lo traga. Es un pez antiguo del acuario sanlorenzano, especializado en hacer conspiraciones y crear problemas entre los peces. Siempre anda cambiando de cardumen, porque dónde se va crea problemas con sus permanentes paková piré.

Aunque la mayoría de los peces nadan en cardúmenes, el PEZ BANANA anda en CACHO. Y aunque antiguamente el rey del acuario era el CACHO, ahora el parece que el “MANGURUYÚ KIÑOKIS” pretende convertirse en el nuevo rey del acuario.

Hablando de pescados. Hasta hace unos días los fans de cierto  “Comité de Emergencia” de por aquí cerca llenaban las redes sociales con “me gusta”…. Toda clase de bichos aparecían “gustando” o “degustando” al Glorioso Comité. Si alguien decía Salud… los bichos enseguida decían “Me gusta, me gusta, me gusta”. Si alguien escribía “proyecto” todos al unísono “me gusta, me gusta…” y así con cualquier palabra que rime con Comité, como por ejemplo: comiste, comí este, te comí…

Pero de repente el nutrido enjambre de fans desapareció de las redes. Ya nadie aplaude nada, a nadie le gusta nada. Nadie lame más nada. ¿Qué habrá pasado? Dicen que los ratones huyen cuando el gato empieza a revisar el patio. ¿Será que anduvo algún periodista sacando fotos o haciendo entrevistas por la zona? CHE DIO!! RAJEMO!! APILLAPAITÉ CHUPÉ!!

Al principio parecía perfil bajo, pero a estas alturas ya parece un caso de PERFIL ENTERRADO.

El negocio del siglo es LA CONSULTORÍA. Es más lucrativo que el petróleo y que encontrar plata yvyguy. Se hacen organigramas (que nadie ve), manuales de funciones (que no funcionan), se hacen reglamentos hasta para tirar pedos (que nadie lee) y se llenan biblioratos y carretillas con proyectos, fatos y curros que cuestan millones de millones. Asesorías raras que se hacen sobre cosas ya asesoradas y archiconocidas y archidocumentadas.

Y al siguiente “ejercicio fiscal” (o sea al otro año) vuelven a consultar lo mismo, a pedir asesoramiento de lo mismo, a investigar los mismos curros, y a gastar MAS PLATA. Y casualmente, los asesores y hace-soretes, son siempre los mismos. Siempre los mismos  “amigos”.

Ahora entiendo por qué al año municipal se le llama “ejercicio”, porque toda la población se las tiene que pasar corriendo como locos para mantener toda una sarta de parásitos y avivados. ¡Pucha que se labura en esta ciudad! ¡Pucha que se crean fuentes de “trabajo”!

La próxima vez que tus viejos candidatos mentirosos prometan TRABAJO, ya saben todos que el trabajo que vas a conseguir es TRABAJAR PARA MANTENERLOS A ELLOS.

Y la próxima vez que les prometan un AUMENTO… no es que les van a aumentar el sueldo. Noooo. Lo que les van a aumentar es el trabajo que les obligan a hacer (a ustedes), para vivir ellos como reyes.

Viendo la forma en la que los paraguayitos y paraguayitas votamos a nuestros “líderes”, la OMS ha suspendido el envío de las vacunas contra el COVIP y el DENGUE.  En cambio a a enviar al “bobero”, a ver si puede terminar con la epidemia de bobería que nos tiene tan mal.