Recuerdan tener cuidado con el uso de potenciadores y energizantes

Desde la Cátedra y Servicio de Cardiología de Adultos del Hospital de Clínicas de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Asunción, recomiendan que el uso de potenciadores sexuales sea siempre bajo prescripción y previo control médico, de manera a evitar complicaciones que puedan ocasionar incluso la muerte por el uso indebido del medicamento.

Los potenciadores sexuales son utilizados generalmente para ayudar a los hombres con disfunción eréctil a mantener la erección y lograr una relación sexual satisfactoria. Pero como todo medicamento tiene sus efectos colaterales, por lo que lo ideal es que su uso sea siempre bajo prescripción médica.

El Dr. Alfredo Meza, Residente de tercer año de Cardiología de Adultos, explicó que en caso puntual del Viagra -cuya droga es el Sildenafil- pertenece a un grupo de medicamentos cuya función es la de vasodilatar, es decir, dilata los vasos sanguíneos por medio de inhibición de una enzima, aumentando el flujo sanguíneo hacia el pene para lograr una erección en hombres con disfunción eréctil. También está indicado como tratamiento coadyuvante en el caso de pacientes con hipertensión arterial pulmonar, tanto hombres como mujeres.

“Lo ideal sería hacer un chequeo previo antes de utilizarlo, sobre todo aquellos varones que sobrepasan los 45 años, necesariamente deben pasar por una revisión para evaluar si el paciente está en condiciones de consumir el medicamento sin que esto le genere algún tipo de complicaciones”.

Señaló que en el Paraguay, la mala alimentación, el sedentarismo y el tabaquismo representan un factor de riesgo que pueden producir complicaciones cardiovasculares en edades más tempranas inclusive.

Por eso recalca la importancia de un chequeo médico con electrocardiograma o ecocardiograma, para descartar si el paciente presenta problemas coronarios o haya padecido un infarto; pues en ese caso, el uso de este tipo de potenciadores está totalmente contraindicado, ya que puede desencadenar en nuevos eventos isquémicos.  

El viagra al producir una función vasodilatadora y relajación muscular, lo que hace es disminuir la presión, y si la persona ya está consumiendo otros medicamentos con efectos similares pueden darse las complicaciones como hipotensión arterial o producirse una taquicardia refleja que es cuando el paciente ya es portador de una arritmia cardiaca”.

El medicamento está indicado para hombres mayores de 18 años de edad que presenten impotencia sexual o disfunción eréctil. No obstante, el profesional aconsejó que a partir de los 50 años de edad, los hombres deben tener especial cuidado, con mayor razón si presentan comorbilidades como la hipertensión, diabetes o cardiopatía isquémica (infartos).

“A todo esto se debe considerar que la actividad sexual es una actividad física, por ende, si esa persona con factor de riesgo no está condicionada para este tipo de actividades, y se sobre exige con las nuevas posibilidades que le brinda este tipo de medicamentos en materia de actividad sexual, entonces desencadena en un cuadro coronario a consecuencia de la misma, y no necesariamente por la medicación”, advirtió el profesional.

Sostuvo además que la función del Viagra o Sildenafil no es precisamente aumentar el deseo sexual, sino que la persona debe tener ese estimulo sexual para que el medicamento ejerza su efecto.

Bebidas energizantes

Sobre los estimulantes como bebidas energizantes de venta libre, recalcó que son productos con altísimas dosis de cafeína, guaraná y aminoácidos. Lo que produce esa energía es la cafeína, por lo que en pacientes con taquicardia supraventricular, el exceso del consumo de café podría ocasionar una arritmia; por lo que se deben tomar en cuenta estos consejos al momento de su consumo.

“No hay energizante de por sí, sino por la enorme cantidad de cafeína que contiene y que equivaldría a consumir una enorme dosis de café concentrado, por eso te quita el sueño, por eso tiene efectos gástricos, por eso favorece las arritmias”, concluyó.

Fuente: Dpto de Comunicación del Hospital de Clínicas